La historia de los perfumes Marc Jacobs comenzó en 2001 gracias a una asociación clave con el gigante de la belleza Coty Inc., quien posee la licencia para crear y distribuir sus fragancias. El debut fue con el Eau de Parfum Marc Jacobs, una fragancia floral verde creada para mujeres. Sin embargo, el hito que catapultó definitivamente a la marca fue el lanzamiento de Daisy en 2007, reconocible por su botella adornada con margaritas. Esta fragancia se convirtió en un icono de frescura y juventud, definiendo el ADN de la marca. Jacobs ha construido su legado en perfumería con un enfoque en diseños de botellas creativos y memorables, often vintage-inspired, y en fragancias que often mix floral and playful notes. Lanzamientos posteriores como Lola (2009), Decadence (2015) y Perfect (2020) han consolidado su posición en el mercado de lujo, dirigido a un público principalmente femenino y amante de la moda.