Un suero ligero y sedoso que infunde la piel con ceramidas restauradoras de la juventud y botánicos potentes para una apariencia visiblemente más suave, firme y juvenil.
• Una combinación de nuevos ingredientes sumado a una mayor concentración de los ya existentes en la fórmula consiguen reparar la barrera cutánea aportando las ceramidas necesarias para alcanzar los niveles óptimos, restaurar la juventud de la piel y su capacidad de generar sus propias ceramidas. El resultado es un suero restaurador de la juventud en cápsulas monodosis con el que la piel parecerá 10 años más joven* - una piel visiblemente más lisa, firme y saludable.

• En nuestras pruebas clínicas los científicos informaron:

• Clínicamente probado que la piel parecerá 10 años más jóven.
• 100% de las mujeres mostraron una mejora en la apariencia general de la piel.
• 95% de las mujeres demostró una mejora significativa en la firmeza visible después de sólo dos semanas.
• Se ha demostrado clínicamente que aumenta la firmeza de la piel en un 58%.
• 97% de las mujeres mostraron una mejora significativa en la aparición de arrugas.
• 100% de las mujeres mostraron una mejora en la luminosidad de la piel.
• 88% de las mujeres mostraron una mejor textura de la piel.
• 86% de las mujeres mostró un tono más uniforme de la piel.
• Este suero de textura ligera y sedosa ayuda a mantener la piel sana y joven, corrigiendo los signos visibles del envejecimiento, a través de una nueva y mejorada fórmula de ingredientes esenciales

Tipo de piel
Normal, Seca, Grasa, Mixta, Sensible, Madura

Tratamiento
Prevención de edad, Hidratacion, Antiarrugas

Aplicar mediante suaves toques alrededor del contorno de ojos 1 ó 2 veces al día.
Extender suavemente con la yema de los dedos en rostro y cuello limpios. A continuación, aplicar el tratamiento hidratante.

Una innovadora legendaria y una emprendedora incansable, la señorita Elizabeth Arden estableció la industria de la belleza estadounidense hace un siglo. Nacida como Florence Nightingale Graham, viajó de la zona rural de Canadá a la ciudad de Nueva York, donde abrió el primer salón Red Door en la Quinta Avenida en 1910. En la década de 1930, Miss Arden había abierto los salones Red Door en la mayoría de las capitales de la moda de todo el mundo, y reconoció orgullosamente sus logros al proclamar que solo había tres nombres estadounidenses conocidos en todos los rincones del mundo: Singer Sewing Machines, Coca. Cola y Elizabeth Arden.

A través de todo, Miss Arden creó tanto un imperio como una nueva industria. Su espíritu emprendedor y su compromiso con la innovación, la calidad y la excelencia siguen siendo el alma de la compañía hoy en día.